Y entonces llegas a lugares remotos, llenos de cosas distintas, todo lo contrario a lo de siempre. Y es que lo desconocido atrae digan lo que digan. Olores nuevos, casas nuevas, detalles nuevos, desastres nuevos. Definitivamente los desastres nuevos son la polla. Eso de liarla y pensar que nada importa, que todo queda y que a la vez nada permanece. Tu vida en otra dimensión.
Tanto por conocer, y el poco tiempo que nos queda.