Dedicado a las personas que son conscientes de que el arte, la poesía, la música y las letras, son los sentimientos que despiertan el alma. A los locos. A los maniáticos. A los perdidos. A los desordenados. A los cobardes. A los distantes. A los inquietos e inquietantes. A los hiperactivos. A los amantes de la Paulaner. A los que surfean. A los desconocidos. A los risueños. A los imaginativos. A los amantes del cine. A los refugiados. A los que odian el queso. A los imperfectos. A los que odian las normas y se salen de lo cotidiano.

Yo también soy una de vosotros.

miércoles, diciembre 3


Por desgracia, por virtud, o por suerte, aquí estoy. Aquí estoy cada día como si fuera el último, o el primero de muchos. No sé si estoy allí arriba o aquí abajo normalmente, pero estoy, y me gustaría que supieseis por qué estoy.
Mi vida se sustenta en dos pilares, no digo importantes, porque básicamente son únicos: "la familia y los amigos". 
El primer pilar no se elige, es el que te toca, pero aun así, yo lo hubiera elegido cada vez que hubiera vuelto a nacer, sin ninguna clase de duda.
El segundo pilar es complicado: puede llegar a ser tan buena tu elección que pasa a ser del primero, o puede ser tan mala tu equivocación que te puede hundir la construcción. 
Empezaré diciendo ante esto, que no te preocupes, porque nadie sabe elegir. El azar o el destino son unos comodines pueden estar implicados en dicha elección, porque hay veces que son demasiado acertadas, y, queridos lectores, la inteligencia no es nuestra mejor arma en este campo. 


Tenemos que creer, y de hecho, creemos, que cabe la posibilidad de encontrar a nuestra alma gemela. No hablo de amor, hablo de "la media naranja amiga", la que incluso es más importante que el amor o que el matrimonio. 
La media naranja amiga es la que hacemos llamar nuestra "hermana o hermano de otra madre", la que sabe como eres porque es idéntica a ti. 
Las leyes de la física citan, por haberlo comprobado experimentalmente, que los polos iguales se repelen: está claro que no somos imanes, porque los polos iguales encajan a la perfección en la amistad. 
Hablo de entender, de apoyarse, de reírse, de escucharse, de gritarse, de pegarse, de cafés y de un alto porcentaje de alcohol en sangre. Hablo de no fallarse. 
Hablo de estar 24 horas de 365 días al año disponible, y de no tener razón para no hacerlo. Hablo de alegrarse por los logros y ayudar en las caídas. Hablo de caer juntos y levantarse airosos. Hablo. Hablo...realmente tendría que callarme. 
En silencio se ven las cosas de otra forma, porque no todo el mundo tiene la misma perspectiva ante diversas situaciones. No todo el mundo da porque sí, la mayoría "dan por recibir". Supongo que después de tantos años en este mundo, todavía no sabemos el significado de la amistad.

Para mi la amistad es asombrosamente fácil:
La amistad es dar el doble y recibir la mitad, sin que eso te importe.
La amistad es ir, volver, y volver a irte, y que todo continúe como siempre.
La amistad es el último cigarrillo del último paquete, la pequeña droga de ese día de mierda.
La amistad es un "hasta morir en el intento" por esa persona.
La amistad es la familia que hay que cuidar para mantenerla en el pico más alto.
La amistad es la sonrisa asegurada en el momento más triste.
La amistad es demostrar sin que te lo pidan, y movilizar a masas para manifestaciones "anti-depresión". 
La amistad es salir, beber, emborracharte, el rollo de siempre, pero con los de siempre. 
La amistad es el número que obtienes al dividir los dedos de una mano entre dos y haciendo su raíz cuadrada. 
La amistad es la felicidad que te falta.
La amistad es una rubia y una morena unidas hasta el final. 

 gracias