Dedicado a las personas que son conscientes de que el arte, la poesía, la música y las letras, son los sentimientos que despiertan el alma. A los locos. A los maniáticos. A los perdidos. A los desordenados. A los cobardes. A los distantes. A los inquietos e inquietantes. A los hiperactivos. A los amantes de la Paulaner. A los que surfean. A los desconocidos. A los risueños. A los imaginativos. A los amantes del cine. A los refugiados. A los que odian el queso. A los imperfectos. A los que odian las normas y se salen de lo cotidiano.

Yo también soy una de vosotros.

martes, septiembre 27


Tengo la manía de hacerlo todo de golpe. De pensar en el momento, de olvidarme de lo que viene después. El vicio de gesticular mucho cuando hablo. De confiar a la mínima. El de decir lo que pienso sin reparo alguno. El vicio de no parar hasta caerme, o hasta que consigan pararme. El de cantar en la ducha la canción más patética de todos los tiempos, o el de arriesgar al máximo con los bordillos de las aceras. El de querer a alguien que me dá tardes de felicidad. También tengo el vicio de equivocarme, de cometer errores que son difíciles de reparar. Pero sobre todo, mi mayor vicio es el de sacar el lado bueno de todo y sí, se que un optimista es un pesimista mal informado, pero a veces es mejor dejar que algunas cosas pasen por alto. Hacer la vista gorda.  Tener los ojos completamente vendados. Y no ver, lo que realmente no te interesa. A veces, hacerse el tonto es la salida más fácil aunque no queramos reconocerlo. Te llamarán tonta en la cara, ¿y qué? ¿no será más tonta esa persona que sufre? el sufrimiento es opcional. Y yo, el sufrimiento lo veo como una manera de malgastar la vida. De malgastar tu vida. De amargarte por cualquier subnormal que no merezca la pena. Así, aun sabiendo lo que pasa, me hago la loca. Como si no pasara nada. Luego las devuelvo. Y créeme, "quien ríe el último, ríe mejor" y sé de lo que hablo.