Dedicado a las personas que son conscientes de que el arte, la poesía, la música y las letras, son los sentimientos que despiertan el alma. A los locos. A los maniáticos. A los perdidos. A los desordenados. A los cobardes. A los distantes. A los inquietos e inquietantes. A los hiperactivos. A los amantes de la Paulaner. A los que surfean. A los desconocidos. A los risueños. A los imaginativos. A los amantes del cine. A los refugiados. A los que odian el queso. A los imperfectos. A los que odian las normas y se salen de lo cotidiano.

Yo también soy una de vosotros.

lunes, febrero 13


Estábamos en Nueva York. El sueño de mi vida. Era tal y como me imaginaba. Bueno, miento, era incluso mejor. Las calles con todas las vallas publicitarias, y todas las boutiques que parecían mansiones de moda cuando entrabas dentro. Cada restaurante al que fui era exquisito, te servían desde comida italiana hasta comida marroquí. ¡Probé por primera vez el té moruno de hecho! EL 'Empire State' era increíble. Y ni hablemos de la estatua de Nueva York, si era bonita en las películas, imagínate en la realidad. Una pasada. Una pasada enserio. Y...¿sabes por qué se todo esto? Porque él me lo contó. En el viaje ni me dí cuenta de que estábamos en Nueva York. No podía apartar la vista de él. Lo único que quería era estar abrazada a él y besarle. Se que suena completamente loco, pero así fue.