Las cosas nunca salen como uno espera que salgan, es más siempre salen completamente al contrario. Nos esperamos lo peor, y luego es lo mejor que nos podría haber pasado. Nos esperamos un gran día y luego...desearíamos no habernos levantado. Bien, ante esto hay dos opciones: lamentarte por no haber acertado y joderte ya que tenias ilusiones y esperanzas, o tomártelo con humor.
¡vivan los días en los que una gilipoyez te hace sonreír!
fdo: 'que nadie te haga llorar, eso es otorgarle demasiado prestigio'