Recuérdame como ese beso inesperado.
Recuérdame como el lunar que nunca nadie te había encontrado.
Recuérdame como la manía que te describe.
Recuérdame como ese cielo que pisan los valientes.
Recuérdame como caricias en tu espalda en invierno.
Recuérdame como un helado de vainilla en verano.
Recuérdame como el cigarro de la suerte.
Recuérdame como la mirada que te cambia la vida.
Recuérdame como un roce de mejillas impredecible.
Recuérdame como ir a 200 por hora en la autopista.
Recuérdame como el mejor baño de espuma.
Recuérdame como el edredón que necesitas después de una gran fiesta.
Recuérdame como la sonrisa más preciosa del universo.
Recuérdame como el detalle que faltaba.
Recuérdame como esos mordiscos de enamorados en la nuca.
Recuérdame como el escalofrío que te recorre todo el cuerpo.
Recuérdame como el desayuno que te llevan a la cama.
Recuérdame como saltar desde cualquier altura hacia la nada.
Recuérdame como las personas que sueñan enamorarse.
Recuérdame como alguien irremplazable.
-Pero, recuérdame.