Dedicado a las personas que son conscientes de que el arte, la poesía, la música y las letras, son los sentimientos que despiertan el alma. A los locos. A los maniáticos. A los perdidos. A los desordenados. A los cobardes. A los distantes. A los inquietos e inquietantes. A los hiperactivos. A los amantes de la Paulaner. A los que surfean. A los desconocidos. A los risueños. A los imaginativos. A los amantes del cine. A los refugiados. A los que odian el queso. A los imperfectos. A los que odian las normas y se salen de lo cotidiano.

Yo también soy una de vosotros.

lunes, septiembre 2


Bésame. Y cuando nuestros labios estén por fin juntos, que se pare el tiempo.
Ha llegado el otoño y nos ha pillado fumando.
Nos.
Me niego a empapar otra piel que no sea la tuya con mis lágrimas.
Me niego a no tener sesión doble de cosquillas los fines de semana.
Y me niego a no picarte ganando a las cartas.
Pero no tengo miedo.
Eso no se acabará. Tan seguro como que es un dos de espadas.

Hiciste que la realidad superara mis sueños. Y ahora, vuelve a ser de día. Y el sol ya no es tan sol, sino más amarillo. Y cada vez que me acuerdo de nuestras gilipolleces de subnormales me río inevitablemente.
E inevitablemente no puedo dejar de decir “te amo”.
Pero eso ya lo sabías.
Así como también sabías que tus caricias me dejaban inmóvil. Quieto.
Mientras todo pasaba a mi alrededor.
Y con todo, me refiero a ti.
Victoria

Tenemos el record de días perfectos. Tantísimos besos invertidos y tan pocas fugas de clase. Curioso. Nunca pensé que dormir al lado de alguien pudiera llegar a ser tan maravilloso. Y necesario. Y por supuesto, nuestras manos solo se preocupaban por agarrarse con fuerza para quitarnos el miedo de madrugada.
Cuantos cuentos soñados contigo, mosquetera. Lo nuestro ya no va de espadas, ni de números, sino de anillos.