Dedicado a las personas que son conscientes de que el arte, la poesía, la música y las letras, son los sentimientos que despiertan el alma. A los locos. A los maniáticos. A los perdidos. A los desordenados. A los cobardes. A los distantes. A los inquietos e inquietantes. A los hiperactivos. A los amantes de la Paulaner. A los que surfean. A los desconocidos. A los risueños. A los imaginativos. A los amantes del cine. A los refugiados. A los que odian el queso. A los imperfectos. A los que odian las normas y se salen de lo cotidiano.

Yo también soy una de vosotros.

jueves, enero 10

Ascensor. Piso menos uno. Bien, por fin el el garaje. Cojeré el coche y meteré quinta nada más arrancar. Quiero hostiarmela hasta que salte el airbag y me frene mis ganas de locura. Piso cero. Aún sigo teniendo ganas de fiesta. Son las siete de la mañana y vuelvo al amanecer. Tacones en mano, desmaquillada, y con todas las medias agujeredas de las quemaduras de cigarros. Piso uno. El piso de los valientes. Los que no tienen las rejas puestas en la ventana. Los que simplemente con un toldo se defienden. Suelo bajar siempre a pedirles un poco de autoestima. Piso dos. El piso de las fiestas. Los que molestan al primero y al tercero, pero no les importa. Cada sábado a las 01:59 exactamente, suena la misma canción: "save tonight" para todas las parejas invitadas a la fiesta. Piso tres. Nuestro piso. Lo alquilamos hará ya 5 años. Nosotros no tenemos nada concreto que nos destaque. Aun así, somos envidiables por todos nuestros amigos. Fuimos los únicos atrevidos a casarnos a los 18 años y a venirnos a vivir juntos esa misma noche. Todavía no hemos entrado en la monotonía de que pasen los días como si nada, disfrutamos mucho. "El paraíso no es más que un piso alquilado" dice el que se acuesta cada noche a mi lado en la cama. "Vivimos en un tercero, pero a la vez tocamos el cielo". Cada mañana me encuentro con una sorpresa distinta a los pies de la cama, ¿y sabeis qué? Sonrío. No pido desayunos con diamantes; a mí se me conquista con una caja de donetes y la perfecta compañía.