que le den a eso de mirar para otro lado y negar la evidencia. Hacerse el loco, cuando la única locura es huir de todo e intentar no girar la cabeza. Asúmelo, no estás hecho para riesgos, y mucho menos para tomar decisiones; queda mucho mejor que las tomen otros por ti y salgas radiante.
Si ya lo decían los sabios: "mal de muchos, consuelo de tontos"